En Busca del Equilibrio

Nombre: Christian
Ubicación: Lima, Peru

lunes, 21 de agosto de 2006

El Desarrollo de los Pueblos


Muchos de los jóvenes, y no tan jóvenes, nos hemos preguntado alguna vez la razón de nuestro subdesarrollo. Al mismo tiempo, ensayamos diversas respuestas como por ejemplo, el hecho de ser muy dependientes del gobierno central, la precaria educación tanto escolar como superior, la escasez de industrias que puedan convertir nuestra materia prima en producto elaborado para poder sacar el mayor provecho a la hora de exportar, la falta de identidad cultural etc. Incluso llegamos a justificaciones tan descabelladas como el hecho de suponer que la raza tiene algo que ver con el desarrollo de nuestro país.

Lo cierto es que, por más que intentemos llegar al origen del problema, una gran mayoría está conforme con la conclusión a la que ha llegado mientras que los demás seguimos dando vueltas en lo mismo sin llegar a una respuesta que nos satisfaga. Peor aún, algunos evitan pensar en ello con lo que solo consiguen aceptar un subdesarrollo personal, aunque sea de forma subconsciente.

Sin embargo, en la revista Punto de Equilibrio número 85, leí una entrevista en la que un profesor de fisiología de la universidad de California, Jared Diamond, manifestaba la relación existente entre el desarrollo de los pueblos, las diferencias geográficas y los lugares en los que las personas se originaron.
Diamond, en su libro Armas, Germenes y Acero, sostiene que las diferencias entre las personas no afecta de ningún modo la evolución y el desarrollo de las civilizaciones. La abundancia y variedad natural de un determinado lugar geográfico (Creciente Fértil), sumado a la escasez y necesidad de una península grande (Europa) obligó a los antiguos habitantes a intentar beneficiarse de ello. Además, según el profesor, los europeos tuvieron la suerte de vivir en un territorio adyacente al más antiguo centro agrícola del mundo. Es por eso que la agricultura llegó a Europa en el año 7000 a.c.

Para mi sorpresa también sostiene que los factores raciales desempeñan un papel en el desarrollo de un país, pero en el sentido de adaptabilidad al medio ambiente y a la resistencia en cuanto a las enfermedades. Por ello a los europeos les costó más establecerse en Africa tropical, en el Tíbet o en el Perú que en otros lugares del mundo en el período de colonización. Pero, como él mismo dice, la mayoría de personas piensa en las diferencias raciales en términos de inteligencia. El hecho es que no existen tales diferencias a pesar de largos años de estudio. Además, hoy en día sabemos que para intentar establecer diferencias raciales es necesario comparar cromosomas y se ha demostrado que la variación entre individuos es mucho más grande que entre grupos raciales. Entonces, seguir pensando en tales "diferencias" depende del nivel cultural y del sentido común de las personas.
Pero cabe hacernos una pregunta esencial: ¿Por qué no ocurrió el mismo tipo de desarrollo en América teniendo en cuenta la gran diversidad en flora y fauna que teníamos entonces y que tenemos ahora? Nuevamente el profesor explica que en nuestro caso hemos tenido pocos animales grandes que pudieron ser domesticados en comparación con Europa y que nuestros cultivos eran la mitad de productivos. Además un factor más importante aún es el hecho de que en América y Africa existe un eje de orientación de Norte a Sur, que dificulta demasiado la adaptación de animales y plantas así como también el flujo masivo tanto de personas como de tecnología. En cambio los ejes de Euro-Asia van de Este a Oeste. Debido a ello las poblaciones cercanas se enriquecieron mutuamente durante muchas décadas.
Sin tener en cuanta las enfermedades, guerras, progreso tecnológico y muchos otros factores que han influido de manera contundente durante toda la historia de la humanidad, Diamond nos brinda un panorama general acerca de cómo los pueblos del mundo son, en extremo, dependientes de su medio.
Finalmente, debo manifestar que mis dudas, acerca del tema tratado han sido parcialmente resueltas. Pero estas aumentarán a medida que pasen los años. Lo único que tengo claro es que nunca debemos subestimar o menospreciar a ningún país, grupo o individuo independientemente del motivo que se presente, porque nunca sabremos con exactitud la situación en las que estarían en otras condiciones, ni como hubiéramos estado nosotros.